por Redacción
El radicalismo platense está definiendo su futuro. En la mesa está la posibilidad de que el presidente de la Junta Central, Pablo Nicoletti, vaya por la reelección, pero en una lista de unidad sus socios lo objetan con el argumento de que es muy personalista y además que llevó al centenario partido a posiciones muy cercanas a las del intendente peronista Julio Alak, y el tema que terminó explotando fue la votación de los concejales radicales en favor del “Plan Mil Cuadras”, una obra que deberán pagar los vecinos y que opositores como el Pro o LLA objetan por ser “una doble imposición para los contribuyentes, ya que un frentista deberá pagar la Tasa Municipal y la obra de pavimento”.
Si bien Nicoletti es vetado por la dirigencia radical local, todavía tiene una chance en la superestuctura provincial en función de un mega acuerdo político que se haga a nivel macro y lo termine incluyendo, y depende de la habilidad del presidente del Comité Nacional, Martín Lousteau.
A favor, Nicoletti tiene que logró presentar en sociedad un bloque legislativo de cinco concejales y que además movilizó en agenda a su partido y lideró un espacio que se llama Juntos por la Ciudad, en donde metió en la bolsa al ARI, el Gen, al socialismo y al exdiputado larretista, Daniel Lipovetzky, pero en contra está la vinculación con el alakismo en posiciones políticas, y haber mostrado las cartas con demasiada anticipación sobre su intención de encabezar una nómina legislativa el año próximo.
En tanto, si no hay lista de unidad y lo dejan competir en internas, es altamente probable que gane la contienda, debido a que cuenta con mejores armados territoriales que los demás sectores internos, y que su oposición, hasta el momento no logró tener una síntesis y mucho menos un candidato.
Dicho de otro modo, en la mesa de caciques locales, Nicoletti pierde la pulseada, en la mesa nacional y provincial en donde se cambian figuritas puede ganarla, y en una interna partidaria tiene altísimas probabilidades de consagrarse. En tanto, si la mesa de negociaciones de caciques locales lo deja pasar, es posible que le quiten todo margen de acción y de negociación hacia el futuro, incluso se objete algún posible acuerdo por la elección del Defensor Ciudadano en el plano local.
Los próximos días serán claves para dirimir la conducción partidaria y también el perfil del radicalismo. O habrá un radicalismo opositor en el escenario local, o seguirá con el estilo light actual, en donde Nicoletti prefiere cargar contra el presidente Javier Milei, y en una instancia secundaria contra algunos aspectos del gobernador Axel Kicillof pero sin generar críticas a Alak.