por Redacción
La ceremonia, durante la cual el presbítero Hernán Remundini ofició una misa de responso, tuvo lugar esta mañana en la cripta donde descansan los restos del exgobernador bonaerense y contó con la presencia de sus familiares.
“Recordar de dónde venimos y conocer cómo se gestó la ciudad refuerza nuestra identidad platense”, sostuvo el secretario de Cultura y Educación, Martiniano Ferrer Picado, quien estuvo acompañado por otros funcionarios municipales, miembros del Concejo Deliberante, allegados al ingeniero Pedro Benoit, instituciones y público en general.
Además de participar de la ceremonia religiosa, los presentes pudieron recorrer las instalaciones del Museo y Archivo Dardo Rocha, que conserva estructuras originales de la residencia del abogado y permite adentrarse en la apasionante historia de la construcción de la capital de la Provincia.
Nacido el 1º de septiembre de 1838 y padre de cinco hijos, Juan José Dardo Rocha estudió Derecho y participó en los enfrentamientos militares entre Buenos Aires y la Confederación, y luego en la guerra de Paraguay.
Tras ocupar varios cargos como funcionario del Estado, en 1864 fue elegido como diputado de la provincia de Buenos Aires, más tarde en el Congreso Nacional y en 1881 resultó electo por unanimidad como gobernador.
La fundación de La Plata estuvo en sus manos el 19 de noviembre de 1882 como “un acto de amor a la unidad nacional”, según puede leerse en su piedra basal, mientras que el diseño y la construcción fueron encargados a Pedro Benoit.
El 6 de septiembre de 1921, el referente y político falleció y sus restos fueron sepultados en la bóveda familiar del cementerio de la Recoleta. En 1940, finalmente, fue trasladado a la cripta del templo platense, junto a los de su esposa Paula Arana.